Quiero que mires un vídeo en el que salen jugadores de baloncesto. Algunos llevan camiseta blanca, otros negra. El ejercicio que te propongo es muy sencillo. Debes contar cuantas veces los jugadores con camiseta blanca pasan el balón a otros jugadores con camiseta blanca. En otras palabras, debes contar cuantas veces un jugador con camiseta blanca pasa el balón a otro de su equipo. No cuentes la veces que el balón llega o parte de un jugador con camiseta negra.
Fácil, ¿no?
¿Que número te ha salido?
¿7, 9, o han sido 10? ¿Quizás 11 0 12?
¿Dudas?
Me da igual el resultado.... porque este vídeo tiene algo mas....
¿Viste algo más? Lo normal es que no, en ese caso vuelve a verlo. Esta vez busca algo diferente.
Sigue bajando después de ver el video.
Ya lo has visto, ¡enhorabuena! ¿Cómo no viste al gorila la primera vez!
Oye, si nuestro ojo no es capaz de ver estos detalles en un momento como el tuyo actual, relajado y tranquilo, ¿qué no verá cuanto esté en un estado de estrés?
Nuestro cerebro es mucho mas frágil de lo que creemos. Y muy sugestionable. ¿A que cuando decides comprar un coche, detectas todos los modelos existentes en la carretera? O si estás embarazada, ves todas las embarazadas cuando estás paseando por la calle.
¡Es el mismo efecto!
¿Te ha ocurrido alguna vez?
sábado, 13 de marzo de 2010
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